La primera edición de la Impact Social Cup, competición de emprendimiento diseñada para promover los ODS en el ecosistema empresarial, coronó en su diputada final a los cuatro mejores proyectos sociales del panorama español.
La lupa inteligente LUP que convierte en segundos cualquier texto en voz se alzó con el primer puesto de la competición, por delante de la iniciativa de coliving rural Rooral, la plataforma de nutrición Indya y la tecnología óptica de WIVI Vision.
Celebrado en La Nave de Madrid ante centenares de entregados asistentes, el evento constituyó una emocionante jornada dedicada al emprendimiento social, bajo la máxima general de que juntos podemos hacer de este un mundo mejor. Bajo un inédito formato de performance & pitch, las ocho startups finalistas se midieron ante el excepcional jurado constituido por Manu Marín, fundador Halotech y presidente de la Impact Social Cup, Vicent Rosso (BlaBlaCar y Consentio), Josep Coll (Red Points y RepScan) y Yaiza Canosa (GOI).
Con un premio de 40.000 euros, se alzó con el título la lupa inteligente nacida en Bilbao LUP, que ayuda a las personas con dificultades para leer convirtiendo texto en voz. En segundo lugar, con 30.000 euros de dotación, se clasificaba la malagueña Rooral, que pone en contacto a pueblos y trabajadores nómadas, combatiendo la despoblación rural, seguida de la valenciana Indya de nutrición inteligente de deportistas, con 20.000 euros, y la catalana WIVI Vision, que evalúa y entrena la visión de forma personalizada con videojuegos clínicos, que ocupó el cuarto puesto dotado con 10.000 euros.
“Hemos creado un evento totalmente disruptivo y ejemplar para emprendedores que quieren cambiar y mejorar el mundo, y tenemos la visión de convertir Impact Social Cup también en un referente mundial. No pararemos hasta conseguirlo, porque las futuras generaciones necesitan modelos reales, valores y proyectos con significado y propósito. Y eso vamos a hacer», aseguraba Tomás Garnelo, cofundador de la Impact Social Cup junto a Pepe Folache y Manu Marín, para quien el futuro de la competición es igual de prometedor.
“No puedo estar más orgulloso de lo que hemos logrado. La energía, la innovación y el compromiso que vivimos son una clara muestra de que el emprendimiento social en España está más vivo que nunca, y hemos demostrado que hay una necesidad urgente de proyectos que no solo innoven, sino que también generen un impacto tangible y positivo. De cara a 2025 estamos llenos de emoción y ambición para crear un evento aún más grande, con sorpresas que inspirarán no solo a los emprendedores, sino también a todos aquellos que buscan un mundo más justo y sostenible”, afirmaba.
