Mercadona se hace fuerte en el escenario del comercio electrónico. La cadena de supermercados española acaba de reforzar su servicio de venta digital con la apertura de una nueva colmena. Se trata de un quinto macroalmacén logístico situado en la ciudad de Sevilla que se encargará de distribuir pedidos online en la zona occidental de Andalucía. Con esta apuesta por el ecommerce, la firma valenciana tiene previsto alcanzar este año una facturación de 530 millones de euros a través de internet, una veintena más que el curso pasado.
En concreto, la empresa dirigida por Juan Roig acaba de adquirir en el Parque Empresarial Higuerón Sur un espacio de más de treinta mil metros cuadrados bajo licitación de carácter público. Se trata de una inversión que ronda los veinticinco millones de euros y que en un principio dará empleo a una plantilla de ciento cincuenta personas. Con la apertura de esta nueva colmena, Mercadona Online llega a los dos mil trabajadores y supera con medio millar las cifras registradas en 2020, en plena etapa de pandemia.
Este quinto almacén tendrá la función de vehicular todas aquellas compras que se realicen de manera virtual en un radio de acción que por el momento comprende las zonas de Sevilla, Huelva y gran parte de Cádiz, aunque la idea es ir abarcando más territorio con el paso de las semanas. Desde la dirección general de Mercadona Online, Juana Roig explica que esta vertiente web de la compañía afronta ahora el reto de la expansión y espera llegar en los próximos años a la mayoría de las provincias españolas.
La ciberseguridad como casilla de salida
El equipo que da forma a este proyecto está compuesto en su mayoría por preparadores de pedidos y repartidores especializados, siempre con la idea de mantener la cadena logística al máximo nivel. Sin embargo, más allá de los empleados que ocupan su puesto en el propio almacén, Mercadona Online también incluye un segmento tecnológico denominado Mercadona Tech que se encarga del mantenimiento y el desarrollo del portal web de la empresa.
Consciente de las oportunidades que ofrece el negocio online, esta sub área de Mercadona ha fortalecido el apartado de ciberseguridad para proteger a los usuarios de la amenaza de la piratería informática en las pasarelas de pago. La idea no es otra que la de despertar una mayor confianza entre los compradores, y para ello se ha puesto en marcha la dotación tecnológica que usan las grandes referencias en este campo, como son las entidades bancarias y las plataformas de juegos de azar.
En el primero de los casos, la nueva hornada de bancos virtuales acostumbra a encriptar la información sensible de los clientes para que esta no quede expuesta en la red frente a terceras personas. El software que utilizan es el conocido como certificado SSL (Secure sockets layer), cuya tarea es la de ocultar los datos personales (números de cuenta, nombres, contraseñas, etcétera) que se depositan en la web y que luego se transfieren hasta el servidor.
En este sentido, también los espacios que se dedican al juego en internet invierten gran parte de su presupuesto en la ciberprotección de los usuarios, sobre todo a la hora de evitar suplantaciones de perfil. De hecho, los casinos online fiables en España son aquellos que incorporan a su estructura web el denominado sistema KYC (Know your customer), un protocolo de verificación de identidad que utilizan las salas para confirmar que los jugadores que tratan de acceder a su cuenta son realmente quienes dicen ser. El mecanismo es simple pero eficaz: el casino solicita al usuario de forma telemática toda la documentación necesaria para luego cotejarla con la que ya existe en su base de datos.
Una evolución prometedora
Los números que viene cosechando el área de pedidos web de Mercadona invitan claramente al optimismo. Al término del ejercicio 2021 la compañía logró facturar en esta parcela 257 millones de euros, es decir, un 45% más que en la campaña anterior. El repunte económico fue gracias a la subida que experimentó el volumen de pedidos, que pasó de los 1,2 millones de 2020 a los 1,8 millones del año pasado. La previsión marca que esta tendencia alcista terminará duplicando los números al cierre de este último cuatrimestre.
La colmena de Sevilla es ya la quinta que la compañía tiene en funcionamiento; las restantes están ubicadas en Valencia, Barcelona, Madrid y Alicante. Todas ellas, que responden al alto nivel de demanda que se da en estas zonas del territorio nacional, han supuesto una inversión de más de setenta millones de euros, a los que se añaden otros veinte millones que han sido destinados a crear una flota de cuatrocientos camiones de tipo ecológico. Esta expansión permite ofrecer a los clientes tiempos de entrega mucho menores, además de un servicio ininterrumpido de lunes a sábado.
Mercadona Online se consolida así en un mercado, el del comercio electrónico, que vivió un espectacular repunte en España durante el zarpazo de la pandemia y que ha mantenido su ritmo de crecimiento hasta la actualidad. El sector ha pasado de registrar un volumen de ventas de treinta mil millones de euros a casi duplicar esa misma cifra en apenas un lustro. No en vano, según los datos que maneja la plataforma de pagos PayRetailers, la tendencia en este último trimestre del curso, ya con el Black Friday rematado y las navidades por delante, está dejando una subida del cincuenta por ciento con respecto al mismo periodo de 2017.