El modelo de consumo actual está basado en la economía lineal, es decir, extraer recursos para fabricar productos nuevos que, antes o después, son desechados como residuos. Sin embargo este ritmo de consumo no es sostenible con la capacidad de reposición del planeta: sólo en España, consumimos todos los recursos que la Tierra tiene capacidad de regenerar en un año en tan sólo 5 meses -concretamente, el 12 de mayo-. Ante esto, la economía circular, que únicamente supone el el 7% de la economía global se presenta como un aliado para cambiar nuestra manera de consumir y dar una solución a la crisis climática.
Este año 2023 Wallapop, la plataforma líder en consumo consciente y humano, ha cumplido 10 años en los que ha conseguido popularizar la reutilización de productos y promover un consumo más responsable. Por eso, con el fin de entender mejor el papel que juega, la plataforma, en colaboración con Deloitte, ha realizado un estudio sobre el impacto medioambiental y económico que generó su comunidad en 2022. Para la elaboración de este estudio, se ha tenido en cuenta innovaciones metodológicas menos exploradas en otros estudios en España, como la tasa de reemplazo, que refleja cuántos productos reutilizados realmente sustituyen la compra de un producto nuevo, o el impacto del uso de algunos productos reutilizados, en ocasiones menos eficientes que sus homólogos nuevos*.
De acuerdo con los resultados, la reutilización de productos de las personas que utilizan Wallapop en el último año ha supuesto el ahorro de:
- 510.535 toneladas de emisiones de CO2, el equivalente a 8 viajes de ida y vuelta al Sol en coche.
- 20.032.328.000 litros de agua, suficiente para llenar el lago de Bañolas (Girona).
- 22.031 toneladas de plástico, la cantidad necesaria para formar una línea de flamencos hinchables desde Madrid a Oslo.
- 82.700 toneladas de metales, (16.178 de aluminio, y 66.522 de acero), suficientes para la construcción del Golden Gate.
- Todo esto supone un ahorro al medio ambiente equivalente a 723 millones de euros, una cantidad que sería suficiente para reforestar 5 veces los Picos de Europa.
Ahorro medioambiental y económico
De acuerdo con los datos analizados por Wallapop, en el 56% de los casos, los productos anunciados en la plataforma no continuarían teniendo una vida útil si no cambiaran de propietario, es decir, sus dueños pensaban desprenderse de ellos o simplemente tenerlos en casa sin usar. Esto supone que, en el último año, gracias a las ventas en Wallapop, se ahorraron 31 mil toneladas de residuos, tantos como los que genera el distrito centro de Madrid a lo largo de 5 meses.
La comunidad de Wallapop también confirma que en el 82% de los casos la compra en Wallapop ha sustituido a uno nuevo. Esto ha generado para ellos un ahorro total que asciende hasta los 2.376 millones de euros en 2022. De hecho, las personas que utilizan Wallapop afirman percibir de media un ahorro del 44% con la compra de artículos reutilizados en vez de nuevos y según el estudio, un usuario promedio de Wallapop ahorraría de media 378€ al año.
Coches, el producto que más impacta en el medio ambiente
Por cada artículo reutilizado que se compra o vende en Wallapop, de media, se evita la emisión de 32Kg de CO2, el equivalente a un viaje en coche entre Málaga y Granada, y se ahorran 1.240 litros de agua, el equivalente a la que consume un adulto en 2 años y 3 meses. Sin embargo, no todas las categorías tienen el mismo impacto. Por ejemplo, motor es la que más impacto genera en la reducción de emisiones, incluso teniendo en cuenta que tienen un consumo potencialmente mayor. Un 38% del impacto evitado proviene de esta categoría, seguida de Hogar y jardín (22%) e informática y electrónica (9%),
Coincide el análisis por productos, y es que los coches reutilizados también son los productos con un impacto más positivo en el medio ambiente. En total, en 2022, la reutilización de coches en Wallapop evitó la emisión de más 196 mil toneladas de CO2, el equivalente a ir y volver al sol en coche en tres ocasiones, además de 5.391 millones de litros de agua, 57.976 toneladas de metal y 14.700 toneladas de plástico. Por su parte, los usuarios también han percibido beneficios económicos por reutilizar sus vehículos, concretamente, han obtenido un ahorro total de 1.205 millones de euros y alrededor de 7.600€ por cada coche vendido en Wallapop en el último año.
Por otro lado, los teléfonos móviles, son uno de los productos más populares en Wallapop y, concretamente, los móviles Samsung Galaxy lideran cada año el top de ventas de la plataforma. Comprar un smartphone reutilizado, además de suponer un ahorro del 43% del precio original de uno nuevo, implica el ahorro equivalente a un vuelo entre Palma y Barcelona (concretamente 53,6 Kg de CO2).
“Priorizar modelos de producción y de consumo distintos es una pieza clave para dar respuesta a la crisis climática y sus consecuencias, y las personas que utilizan Wallapop están al frente de este fenómeno. Cuando compran o venden productos reutilizados, aprovechan al máximo cada objeto fabricado y reducen los residuos innecesarios. Saben que son compras inteligentes, sostenibles, de calidad y al alcance de todos”, explica Pol Fàbrega, responsable de sostenibilidad de Wallapop. “Es una transición necesaria y que ya se ha iniciado, y desde Wallapop queremos acompañar a todos en este cambio de mentalidad. Desde su creación, la compañía ha facilitado a las personas dar una segunda vida a más de 640 millones de productos”, concluye.
Wallapop agradece la contribución de su comunidad con el documental GRACIAS
Wallapop celebra con este estudio el impacto positivo generado en el planeta y la economía por su comunidad, a quienes dedica su primer corto documental de autor, titulado “GRACIAS”. En esta pieza audiovisual, Ana Rujas, escritora y guionista, y Luc Knowles, realizador, ponen el foco en seis historias reales que nos muestran cómo alargar la utilidad de los objetos que nos rodean, no solo nos hace sentirnos mejor con nosotros mismos, sino que nos puede cambiar la vida. En estos testimonios se mezclan emocionantes casualidades, conexiones inesperadas y proyectos alejados de una rutina establecida, que nos enseñan nuevas formas de entender y relacionarnos con el mundo que nos rodea.