La marca personal es más importante de lo que tú crees. No sólo para ser percibido como una opción preferente en una temática concreta, sino que, además, una marca personal sólida genera impresiones positivas hacia la empresa con la que trabaja o el nuevo proyecto emprendedor que se está realizando.
Todo tiene su fundamento en el «Efecto Halo», que también se puede extrapolar al trabajo profesional. Las marcas personales sólidas benefician a las marcas empresariales. Transmiten más confianza al entorno que los rodea. Si se le ve trabajando en una empresa, se presupone que estará contento trabajando en ella y que está aportando un alto valor añadido a la misma y, por tanto, la Propuesta de Valor de la compañía podría ser mejor percibida. Asimismo, si es una marca personal con una gran visibilidad personal, la empresa sale aún más favorecida. Por eso, los Influencers o Influyentes son tan valorados por las empresas y éstas buscan sus patrocinios o sus servicios de trabajo.
La publicidad de los famosos también son un ejemplo de influencia positiva (tienen un alcance masivo, pero impactan positivamente en nichos de mercado concretos) y los resultados obtenidos lo corroboran. También hay otros ejemplos de influencia positiva que corroboran lo que digo, como, por ejemplo, los siguientes: el fichaje de Marissa Mayer por Yahoo! impulsó las acciones de la compañía, el fichaje de Bernardo Hernández por Flickr subió las expectativas depositadas en la misma, el importante retorno de Steve Jobs a Apple supuso el relanzamiento de la compañía, Alex Navarro y Carlos Bravo ya generaban una gran expectación en momentos previos al lanzamiento de Quondos (sin saber la gente nada del mismo), etc.
No olvidemos que estamos entrando en un nuevo modelo económico llamado Talentismo, donde lo intangible (como, por ejemplo, el valor añadido del capital humano) será más valorado que lo tangible. El mejor activo de una empresa son las personas y las empresas cada vez más buscan personas con una marcada marca personal. Tanto por los conocimientos que les aportan (y el conocimiento es dinero) como por la generación de expectativas positivas que produce en el entorno.