El Consejo de Ministros da un paso más para acabar con los problemas legislativos de los drones. El viernes pasado se aprobó el Real Decreto que desarrolla y amplía el marco normativo adoptado inicialmente por la Ley 18/2014 para la realización de actividades con aeronaves pilotadas por control remoto (drones). Los profesionales podrán volar sobre poblaciones, personas, en espacio aéreo controlado y de noche, tras presentar un estudio de seguridad y con autorización previa de AESA.
Los primeros pasos que se dieron para la regulación de los drones fue en 2014, cuando se aprobó un marco regulador temporal para la realización de este tipo de actividades. Esta Ley ha facilitado el desarrollo de este sector emergente, que actualmente deja cifras asombrosas como que existen casi 3.000 operadores, 3.693 pilotos y 4.283 drones. Además en España también existen 74 escuelas de formación y una veintena de fabricantes.
Requisitos en formación, limitaciones y condiciones de diseño
El nuevo Real Decreto establece los requisitos para que los operadores de drones puedan desarrollar de forma segura actividades en entornos en los que hasta ahora no era posible hacerlo, como el sobrevuelo en las inmediaciones de edificios, reuniones de personas al aire libre y vuelos nocturnos. Para ello será necesario realizar un estudio de seguridad de la operación y tener una autorización previa de AESA, entre otros requisitos. A partir de ahora también están permitidas las operaciones en espacio aéreo controlado, si bien se precisarán requisitos de formación del personal y de los equipos, así como un estudio aeronáutico de seguridad coordinado con el proveedor de servicios de tránsito aéreo y la previa autorización de AESA.
En la nueva normativa, realizada en términos equivalentes a los marcos normativos existentes en otros países europeos, también se establecen diversas condiciones que deben cumplir las organizaciones de diseño, fabricación y mantenimiento de este tipo de aeronaves o los requisitos de formación para su pilotaje.
Este Real Decreto contiene además medidas de limitación relativas al uso recreativo de los drones, con objeto de garantizar la seguridad del espacio aéreo y de la ciudadanía. Teniendo en cuenta la afectación a la seguridad pública que puede implicar el uso de drones, el nuevo reglamento incorpora una serie de disposiciones complementarias como que se comunicará con anterioridad al Ministerio del Interior la ejecución de operaciones sobre aglomeraciones y zonas urbanas. Además, por motivos de seguridad pública, las autoridades competentes en la materia podrán limitar la operación de drones.
