La incertidumbre sobre el coronavirus sigue creciendo. La alarma social ya es una realidad y las autoridades piden a los ciudadanos que no salgan de sus casas a menos que sea estrictamente necesario. En este sentido, los consumidores acuden cada vez menos a los supermercados, tras haber vivido unos días de arrasarlo todo en estos establecimientos, y según eMarketer, la solución podría pasar por el comercio electrónico.

Casi la mitad (47.2%) de los internautas de EE.UU. encuestados por Coresight Research el mes pasado ya afirmaban estar evitando centros comerciales y supermercados. Además, el 74,6% de los encuestados afirmaron que, si el brote empeoraba se alejarían complemente de estos lugares de aglomeración. Y así está siendo. 

Lo mismo ocurre con las tiendas físicas en general. Alrededor del 32.7% de los encuestados ya estaban evitando las tiendas físicas hace un mes, y más de la mitad señalaron que los evitarían si el COVID-19 se propaga, como estamos viviendo actualmente. 

«Es comprensible, dada la incertidumbre en torno al coronavirus, que las poblaciones vulnerables eviten los entornos físicos que aumentan las posibilidades de exposición», afirma Andrew Lipsman, analista principal de eMarketer. «Pero las necesidades de su hogar no desaparecen y es más, incluso pueden aumentar debido a la petición de los gobiernos de quedarse en casa. Esto está generando que muchas personas busquen acumular recursos en sus casas«, añade..

Cada vez son más los que se refugian en el comercio electrónico para no salir de sus casas. Pero la otra cara de la moneda es que no hay ecommerce, por grande que sea, que aguante esta situación de sobrecarga durante mucho tiempo. Los clientes de Amazon, por ejemplo, ya han recibido notificaciones que indican: “Lamentamos que su entrega llegue tarde. La mayoría de los paquetes tardíos llegan en un día. Si no ha recibido su paquete para mañana, puede solicitar un reembolso o un reemplazo«. Además, aquellos que quieran comprar artículos para el hogar y alimentación de Amazon Prime Now también pueden anticipar retrasos. La compañía de Bezos ha afirmado que tanto la web como la aplicación móvil están siendo saturadas y que «en este momento, la disponibilidad de entrega puede ser limitada».

En general, las ventas de productos básicos de consumo (CPG) están aumentando, algo que era de esperar. Sin embargo, según los datos de Nielsen, hay productos que destacan curiosamente por encima de otros: las ventas de leche de avena aumentaron un 305.5% en la semana que terminó el 22 de febrero, y en contraste, las ventas de agua aumentaron solo un 5.1%: por debajo de frijoles secos, bebidas energéticas y pretzels.

Como era de esperar, el estudio de Nielsen también señala que los artículos de GPC relacionados con la salud están creciendo. Las ventas de mascarillas, por ejemplo, crecieron un 78% durante la primera semana de un período de cuatro semanas que finalizó el 22 de febrero, en comparación con el mismo período del año pasado. En la cuarta semana, las ventas aumentaron un 319%.