Las empresas españolas de moda mantienen el optimismo, aunque con más cautela. En un contexto marcado por la inestabilidad internacional y la amenaza de un debilitamiento del consumo, el 70% de las empresas del sector prevén aumentar su facturación en 2023, doce puntos menos que el año anterior. El dato está por debajo del de 2022, cuando el 82% de las compañías aumentaron sus ingresos, un resultado marcado por la recuperación de la normalidad social y por la situación geopolítica y económica internacional. 

Esta es una de las conclusiones que se desprende de la decimotercera edición del Barómetro Veepee-Modaes de Empresas de Moda en España, un estudio patrocinado por Veepee y elaborado por Modaes a partir de los testimonios de una muestra de 300 empresas españolas de moda. El informe se presenta como un referente para las empresas del sector y tiene el objetivo de ser una herramienta para que empresarios y directivos de este negocio conozcan la evolución del sector de la moda en España, así como para tomar decisiones fundamentadas en cuanto a su estrategia empresarial. 

El optimismo es también bastante generalizado en lo que se refiere a las previsiones para la plantilla. Así, el 48% de las empresas encuestadas apunta a un aumento de su plantilla en 2023. En 2022, el 51% de las compañías aumentaron su plantilla. Otro 42% optó por mantener estables en número sus equipos, mientras que un 7% la redujo.

En general, en la edición de este año se modera el optimismo de las empresas: un 63% de las compañías creen que la situación del mercado de la moda es regular y un 9% que, directamente, es mala. En 2022, el porcentaje de empresas que creía que la situación era regular se situaba en el 57%, por un 8% que la calificaban de mala.

De hecho, el porcentaje de empresas que la valoran como buena se sitúa en el mínimo histórico, con un 28%, frente al 32% de los encuestados del ejercicio pasado.

El retail, canal preferido

Otra de las conclusiones de esta edición es una apuesta renovada por el canal físico. Aumenta al 38% el porcentaje de compañías que apuestan por el retail como canal más importante a medio y largo plazo, situándose 16 puntos por encima del dato registrado en 2022. 

Este año, sólo el 22% de las empresas consideran el canal online como el más relevante en su estrategia de distribución actual y de futuro. Hace un año, este porcentaje se situaba en el 37%, y en 2021 y 2020 ascendía al 46% y al 59%, respectivamente.

Además, la barra libre de los envíos gratuitos parece haber llegado a su fin. En 2023, el porcentaje de empresas que cobran por los envíos se sitúa en el 14%, cinco puntos más que en el ejercicio anterior. Además, un 60% de las empresas ya cobran por las devoluciones online, mientras que este porcentaje era sólo del 49% en 2022.

Tendencias a futuro

Entre las tendencias a futuro, hay un claro perdedor, el metaverso, que pasa de ser señalada por el 20% de las compañías en 2022 a sólo el 2% en 2023.

En cuanto a los retos, destaca el cambio en la autopercepción de las empresas en materia de sostenibilidad. Un 13% de los principales operadores del sector confiesan no estar nada preparados para hacer frente a los cambios, en comparación con el 10% del ejercicio 2022. El 67% dice estar parcialmente preparadas.

Además, cada vez más empresas reconocen que la legislación es el principal factor por el cual la sostenibilidad es relevante para su compañía: así lo afirman un 22% del total. Para un 39%, es cuestión de reputación y para un 31%, porque lo exige el cliente.

¿Y el consumidor?

Por primera vez, el informe además incluye datos que aportan la perspectiva del consumidor, ofrecidos por Kantar. Entre las principales conclusiones se encuentra que el 41,1% aseguran haber dejado de comprar productos de moda por su precio, un 69,7% controlan los gastos para ahorrar y el 30,5% estaría dispuesto a pagar más por prendas fabricadas con tejidos ecológicos o sostenibles.