El comprador online suele sentir la ilusión al hacer clic en el botón de pedido. Recibir y abrir el paquete es el punto culminante de la compra si la logística funciona correctamente. Es un factor decisivo para el éxito de un eCommerce. El servicio de paquetería GLS contribuye a ello en el comercio electrónico nacional e internacional.
Para la mayoría de las personas, comprar en Internet es hoy en día tan normal como el café matutino. En Europa, la facturación del comercio electrónico en el segmento B2C superará este año la frontera de los 600 000 millones de euros[1]. En 2016, ya el 11 % de las empresas españolas utilizaron este prometedor canal de distribución[2]. Al mismo tiempo, con el apoyo de sus socios logísticos, se adaptan cada vez más al creciente nivel de exigencia de los compradores.
El consumidor como prioridad
Para el consumidor, es importante es que los pedidos lleguen en perfectas condiciones y en el plazo de entrega previsto. De esta manera la compra online se vive como una experiencia positiva y el comprador estará encantado de volver a visitar la tienda virtual. Sin embargo, es frecuente que en los domicilios particulares no haya nadie que pueda recibir los paquetes durante el día. Para solventar esta situación, GLS Spain lanzó en septiembre el FlexDeliveryService. Con este servicio, la empresa de paquetería brinda a los consumidores españoles diversas posibilidades de entrega, incluso si el envío está de camino.
GLS comunica a los destinatarios por correo electrónico el plazo de entrega previsto. Así, si un eshopper prevé que no estará en casa, puede modificar la opción de entrega inicial.
Las alternativas para los destinatarios de los paquetes son:
- Nueva fecha de entrega
- Entrega en dirección alternativa, por ejemplo el trabajo.
- Entrega en cualquiera de los 1200 ParcelShops o puntos de conveniencia GLS
- Recogida en delegación o en alguna de las más de 350 agencias de GLS en España.
- Rechazo del paquete
De este modo se flexibiliza la recepción del paquete, simplificando el envío de mercancías a particulares y aumentando la satisfacción de clientes y destinatarios. Los receptores pueden determinar de antemano cuándo y dónde recibir su envío y los remitentes tienen menos reclamaciones.
Flexibilidad en los envíos internacionales
Fiabilidad y comodidad son también características importantes en el eCommerce nacional. En el año 2016, aproximadamente el 18 % de las compras online (un 4 % más que el año anterior) se realizaron en países europeos[3]. También son cada vez más las tiendas virtuales españolas que se benefician de la creciente apertura al mundo de los consumidores e impulsan su negocio mediante una oferta internacional
GLS les ofrece el FlexDeliveryService también en los envíos internacionales. “De este modo ayudamos a las empresas a aprovechar el gran potencial de crecimiento del eCommerce internacional”, explica Demian Folla, Division Manager de GLS Spain. “Nuestra red europea está estrechamente interconectada tanto a nivel informático como mediante líneas regulares coordinadas con precisión. Ofrecemos el FlexDeliveryService en 15 países, para posibilitar la entrega flexible de un país a otro”.
Estrecha conexión a mercados clave
Francia es uno de los principales países de exportación para los clientes de comercio electrónico de GLS Spain. Alrededor del 40% de los paquetes de GLS Spain tiene como destino el país vecino, donde son entregados conforme a los deseos de los destinatarios franceses. Lo mismo ocurre con los envíos a Dinamarca, Países Bajos, Croacia, Rumanía, Eslovenia, Eslovaquia, Chequia y Hungría.
En lo que respecta a las importaciones de Europa, los envíos llegan principalmente de tiendas con origen Alemania pudiendo los remitentes escoger entre las diversas opciones del FlexDeliveryService. GLS Spain está así conectada con otros 12 países del grupo que a su vez, garantizan un seguimiento de envíos transfronterizo prácticamente en tiempo real.
Una densa red para ofrecer servicio de calidad
Se requieren estructuras capilares sólidas para agilizar y facilitar los procesos desde la recogida hasta la entrega, ya sea a nivel doméstico o internacional. GLS cuenta en España con 24 hubs y más de 350 agencias. Además, los consumidores de todos el país disponen de más de 1200 ParcelShops asociados que pueden ser elegidos como dirección de entrega alternativa, donde siempre haya alguien presente para recibir los paquetes como si de un buen vecino se tratase. “En breve también será posible llevar los paquetes a los ParcelShops para su devolución”, revela Demian Folla. “Además, los particulares y las pequeñas empresas que sólo realizan envíos de forma ocasional podrán enviar sus paquetes a toda Europa con GLS.”
Los hubs internacionales de GLS Spain en Madrid y Barcelona está estrechamente conectados a la red europea de GLS, que cubre 41 países europeos mediante filiales propias y empresas asociadas. GLS cuenta con más de 70 hubs, y más de 1000 delegaciones a las que se añaden cerca de 17.000 ParcelShops en 15 países. “Entregamos en los principales mercados europeos en plazos de entrega que oscilan entre 24-48 horas”, señala Demian Folla. “La alta calidad y la flexibilidad son pilares fundamentales para satisfacer los altos niveles de exigencia del eCommerce y garantizar la satisfacción en el momento de la entrega.”
[1] Fuente: Ecommerce Foundation 2017
[2] Fuente: Statista 2017
[3] Fuente: Eurostat 2016