El House Judiciary Committee propone aumentar los impuestos en las ventas online de cara a resolver el debate entre minoristas tradicionales, gobierno de los Estados Unidos, y las empresas de ecommerce en referencia a las tasas que se deben pagar por comerciar en el canal.
El proyecto de ley, impulsado por el presidente del comité judicial, Bob Goodlatte, tiene como objetivo según el organismo, simplificar la forma en la que los impuestos de venta online son recaudados por los diferentes estados. Este proyecto, conocido como “Online Sales Tax Simplification Act of 2016”, aborda lo que ellos llaman “deficiencias en las facturas fiscales y el gravamen de los minoristas en el pago y cobro”.
«Esperamos que este movimiento traerá la atención necesaria para que el Congreso avance en el tratamiento de las compras realizadas online de la misma manera que se realizan a los minoristas tradicionales,» declaró David French, vicepresidente de relaciones gubernamentales de la National Retail Federation. «Con el continuo aumento de las compras online, es hora de que el Congreso actúe. La ventaja de precio que poseen los vendedores online cuando no tienen que cobrar el impuesto a las ventas se ha traducido en una desventaja de las tiendas al por menor de ladrillo y mortero en casi todas las comunidades de tod el país en los últimos años. Eso no se puede permitir que continúe». La normativa actual sólo requiere a los retailers online estadounidenses cobrar impuesto de venta en los estados donde tengan presencia física, bien sea su sede, o un hub logístico.
La propuesta de Goodlatte tendría impuestos de acuerdo con la base tributaria del minorista y la tasa impositiva en el estado en que están enviando las mercancías. Es decir, si un consumidor de Nueva York compró un producto de un minorista con sede en California, el producto estaría sujeto a las normas fiscales de California, pero a su vez a la tasa de impuesto de Nueva York. El sistema actual establece que la transacción sólo se grava si el vendedor tiene presencia en Nueva York.
El proyecto de ley también se repercutiría en las disposiciones específicas para los vendedores extranjeros y los cinco “NOMAD States” – Alaska, Montana, New Hampshire, Delaware y Oregon – que en la actualidad no cobran impuesto sobre las ventas.