El último estudio GfK Clima de Consumo Europeo nos vuelve a mostrar que las expectativas económicas en España siguen a la baja por tercer trimestre consecutivo. Si comparamos con el trimestre anterior, han caído 4 puntos, pero si lo hacemos con respecto a septiembre de 2015, el descenso llega hasta los 21 puntos. Esto sitúa el indicador en nuestro país en los 13 puntos positivos, muy alejados de los 34 registrados hace 12 meses y de las primeras posiciones que ese resultado nos otorgaba entre los 16 países analizados.
De esta manera, España se sitúa en la sexta posición, por detrás de República Checa (36), Eslovaquia (29), Polonia (29), Países Bajos (18) y Portugal (15). Durante los nueve meses de 2016 y tras la significativa caída de enero, tan solo se ha observado una mejora en las expectativas sobre la situación económica en nuestro país en dos ocasiones (mayo y agosto). Y es que la coyuntura a lo largo de todo este año ha estado marcada por la incertidumbre.
Por su parte, las expectativas de ingresos de los hogares españoles presenta el mismo patrón de comportamiento que el de expectativas económicas, a pesar de que su descenso no es tan pronunciado. Con respecto a la misma medición de hace un año la bajada es de 11 puntos y de 4 en relación al segundo trimestre de 2016. Aunque este indicador todavía se sitúa en valores positivos (9 puntos), España es la economía que más ha visto reducir sus previsiones de ingresos en un año.
Otro hecho que se viene repitiendo a lo largo de este año es la estabilidad en las expectativas de gasto. A pesar de que todavía estamos en valores negativos (-5), la disposición a comprar es exactamente la misma que la de hace un año. Este hecho podría hacer suponer, que de aclararse la situación de incertidumbre, podría producirse una mejora en la intención de compra de los hogares españoles de aquí al cierre de año y en los primeros meses de 2017. Además, los expertos prevén que el consumo privado crezca seis décimas más de lo previsto al cierre de 2016.
Las expectativas económicas en Europa: la mayor caída del trimestre para Alemania
Los 16 países estudiados han presentado un comportamiento más bien positivo en sus expectativas económicas al mes de septiembre, ya que 10 de ellos han registrado avances en el último año. La mejora más significativa recae en Eslovaquia que ha subido 17 puntos desde 2015.
El declive de nuestro país de los últimos doce meses sólo es comparable con Italia, que durante el mismo período ha caído 26 puntos, hasta ubicarse en los
-41 puntos: el indicador más bajo. Grecia, tras recuperar 8 puntos en el último trimestre, sitúa a su economía en-37, la segunda más baja de la región. Otro descenso importante ha sido el registrado por Alemania, que retrocede 11 puntos en solo tres meses, la mayor caída en ese período.
En cuanto a Reino Unido, el país recobra ligeramente la confianza en su economía y sube 4 puntos en los últimos tres meses, aunque las expectativas económicas se mantienen en números rojos: de -6 en junio a -2 en septiembre.
Respecto a las expectativas de ingresos, Alemania lidera claramente este indicador entre los 16 países del estudio, con 53 puntos positivos, una puntuación muy alta, a pesar del retroceso de 7 puntos que ha experimentado en el último trimestre. Le sigue República Checa con 52 puntos, y al alza, ya que ha subido 14 puntos en el último año, 8 de los cuales han sido en estos tres últimos meses.
Entre todas las subidas, la mayor ha sido la de Polonia, que ha visto mejorar sus expectativas de ingresos en 36 puntos el último año, al pasar de 7 a 43 puntos.
Por otro lado, los países con peores expectativas en los ingresos de las familias son Grecia (-38), Bélgica (-15), Francia (-14), Italia (-10) y Países Bajos (-6)
Finalmente, en relación con las expectativas de gasto, Alemania mantiene el liderazgo en este indicador, tal y como lo ha hecho en los últimos años, al registrar 53 puntos en septiembre, sólo un punto menos que en junio. Por detrás y a 26 puntos está República Checa (27) y Bulgaria (21).
Sólo tres países están en valores negativos: España (-5), Portugal (-17) y Grecia (-43).
Este indicador tiene un comportamiento bastante positivo, ya que en el último año, 12 de los países estudiados registran mejorías de distinto grado en su disposición a comprar. El mejor de todos lo experimenta Polonia con una subida de 21 puntos, al pasar de -9 a 12 puntos, en 12 meses.
Sólo dos países muestran retrocesos, Grecia y Reino Unido. Éste último se deja 8 puntos al caer de 15 a 7 puntos, en el último año.
El país y los hogares caminan por sendas distintas en España y Alemania
GfK ha realizado un seguimiento trimestre a trimestre de la brecha entre las percepciones de los españoles con respecto a la economía del país, frente a la de sus propios hogares. Durante los últimos meses de 2015 ella no hizo más que ampliarse, hasta llegar a los 59 puntos a finales de ese año.
En 2016 esta distancia ha ido recortándose: en el primer trimestre se situó en los 31 puntos y en junio en 25. Hoy ambos indicadores se muestran aún más cercanos, ya que sólo los distancian 18 puntos: las expectativas sobre la economía se situaron en 13 puntos y las de gasto en -5.
Esta paradoja entre lo macro y lo micro en nuestro país, que muy poco a poco se acorta, habla de la confianza contenida en el país y sus posibilidades, al tiempo que indica que el consumo actual seguirá a corto plazo, si se mantienen las mismas condiciones de incertidumbre.
Por otro lado, es interesante ver que en el caso alemán la población desvincula el comportamiento de la economía nacional de su propia economía doméstica, pero en sentido contrario al caso español. Es así como la población percibe que sus ingresos y sus gastos se mantendrán a toda máquina (53 puntos en ambos casos), mientras que la economía del país se moverá de forma más acotada, hasta ubicarse en los 7 puntos, nada menos que 46 puntos menos.