No es la primera demanda por monopolio a la que se enfrenta Alphabet, la matriz de Google, ni en Estados Unidos ni en la Unión Europea. Sin embargo, en esta ocasión, los analistas coinciden en que, si el gobierno estadounidense gana la demanda antimonopolio, las consecuencias serían mucho más graves para la compañía. De hecho, según recoge ‘The Wall Street Journal’, el posible cierre del negocio publicitario de Google remodelaría el sector de la publicidad online y daría a los anunciantes más flexibilidad para salir del ecosistema de Google sin ningún riesgo para sus negocios.
De prosperar el caso, los ejecutivos de la industria publicitaria y de medios también creen que una escisión de activos es más probable que una venta. En este caso, reiteran, “vender los activos podría ser un desafío, porque las grandes compañías de tecnología y medios que podrían pagar tal acuerdo podrían enfrentar sus propios obstáculos antimonopolio”, por lo que, “una escisión sería más probable”.
El Departamento de Justicia de EE.UU, dirigido por el fiscal general Merrick Garland, junto a ocho estados, ha acusado a Google de haberse hecho de forma ilegal con el dominio en el mercado global de la publicidad digital y de, en definitiva, haber roto la competencia en el sector. La demanda se dirige a la base de su negocio (en torno al 80% de sus ingresos procede de la publicidad online) y una de las reclamaciones de los demandantes es que se deshaga de su plataforma de gestión de anuncios Google Ad Manager, que incluye su servidor publicitario, la suite de herramientas DoubleClick y la plataforma de compraventa de anuncios AdX.
“La competencia en el espacio de tecnología publicitaria está rota, por razones que no han sido accidentales ni inevitables. Un mastodonte de la industria, Google, ha corrompido la competencia legítima de la industria de tecnología publicitaria, participando en una campaña sistemática para tomar el control de una amplia gama de herramientas de alta tecnología usadas por editores, anunciantes y corredores para facilitar la publicidad digital”, alega el escrito.
Google no ha tardado en responder a la DOJ y lo ha hecho a través de un artículo en su blog donde ha negado haber actuado mal: “El DOJ exige que deshagamos dos adquisiciones que fueron revisadas por los reguladores estadounidenses hace 12 años (AdMeld) y hace 15 años (DoubleClick). Al tratar de revertir estas dos adquisiciones, el DOJ intenta reescribir la historia a expensas de los editores, los anunciantes y los usuarios de Internet. Ambas adquisiciones nos permitieron invertir fuertemente en el desarrollo de tecnologías publicitarias nuevas e innovadoras. Estos acuerdos fueron comprobados por los reguladores, incluido el Departamento de Justicia, y se les permitió proceder. Desde entonces, la competencia en este sector no ha hecho más que aumentar”.
En este sentido, en declaraciones al WSJ, Rajeev Goel, cofundador y director ejecutivo de PubMatic, puntualiza que este caso antimonopolio junto con otras batallas legales que enfrenta la compañía, “está empujando a los clientes potenciales a explorar alternativas a Google”.
El servidor de anuncios de Google es utilizado por el 90% de los grandes editores, mientras que su intercambio de anuncios tiene una participación de mercado de más del 50%, según la demanda del gobierno. En los últimos años, Google ha fusionado estas herramientas en un solo producto llamado Google Ad Manager que, junto con sus negocios de publicidad móvil y redes, registró 31.700 millones de dólares en ingresos en 2021.
Esta es la segunda vez que el Departamento de Justicia estadounidense presenta cargos contra la tecnológica. En 2020, el organismo emprendió un proceso judicial contra Google por ejercer prácticas monopolísticas para mantener su dominio en el sector de las búsquedas en Internet, así como en la publicidad que acompaña a estas búsquedas.
Despido de 12.000 trabajadores en todo el mundo
Alphabet también anunció la pasada semana el despido de 12.000 trabajadores en todo el mundo, lo que equivale al 6% de su plantilla. Se trata del mayor recorte de personal en toda la historia de la compañía. Sundar Pichai, CEO de Alphabet, anunció esta medida en una carta remitida a todos los empleados, en la que explicó que “con este recorte de empleo la empresa busca responder al debilitamiento de las condiciones económicas a nivel global”.
“En los dos últimos años hemos vivido periodos de crecimiento espectacular. Para igualar y alimentar ese crecimiento, contratamos para una realidad económica distinta de la actual”, alegó Pichai, quien se disculpó ante los trabajadores: “Asumo toda la responsabilidad por las decisiones que nos han llevado hasta aquí”. Google ya ha comunicado a los empleados despedidos de EE.UU su decisión. En el resto del mundo la compañía ha asegurado que “el proceso llevará algo más de tiempo debido a las leyes y prácticas locales”.