La frecuencia y la sofisticación de los ataques cibernéticos se han disparado en los últimos años, debido, entre otros factores, al imparable auge del comercio electrónico y los nuevo modelos de trabajo, como el teletrabajo. Los hábitos de consumo han cambiado y ya nadie duda de que el modelo de la economía se está encaminado hacia un comercio omnicanal. La omnicanalidad es un concepto que lleva años sonando pero que en los últimos tiempos ha cogido una especial fuerza.
Para poder desarrollar una buena experiencia omnicanal y acercar todas las empresas online al mundo físico y experiencial, los datos se han convertido en la parte clave de la ecuación del éxito. En este sentido, los ciberataques están creciendo de forma exponencial, y los delincuentes han puesto su foco en las tiendas online.
Los sitios web de comercio electrónico contienen muchos datos sobre sus clientes, y eso hace que los propietarios de dichos negocios sean uno de los objetivos preferidos de los ciberdelincuentes y es que, a día de hoy la información del cliente es la categoría de datos más valiosa para los atacantes. En el número cinco de la información más valiosa para los delincuentes, se encuentran las contraseñas de los clientes.
Una de las bases del ecommerce es la confianza, y es que los clientes deben fiarse de los comerciantes y proporcionarles datos personales y de pago con cada compra. Ganarse la confianza de los clientes es fundamental para la conversión, sin embargo, hablamos de un proceso largo de conseguir pero que una vez se ha perdido es muy, muy difícil de recuperar. Es más, el 64% de los consumidores afirman que es poco probable que vuelvan a comprar en una empresa a la que le han robado sus datos personales.
En este sentido son cada vez más las empresas que han optado por implementar una VPN, una Red Privada Virtual para cifrar las comunicaciones y garantizar la seguridad de los datos de sus usuarios.
VPN: Cuida de la privacidad de tu cliente
Las VPN encapsulan la información, que es gestionada por el servidor dispuesto por un proveedor (o perteneciente a la propia empresa), creando un túnel VPN.Gracias a una conexión VPN, podemos establecer contacto con máquinas que estén alojadas en nuestra red local -u otras redes locales- de forma totalmente segura, ya que la conexión que se establece entre ambas máquinas viaja totalmente cifrada.
¿Pagar por un VPN? Si no estás pagando un servicio, entonces tú eres el producto
Hay quien se fía y quién no, pero lo cierto es que los VPN gratuitos tienen una gran cantidad de desventajas que han salido a la luz con diversos escándalos de seguridad en el pasado. Por otro lado, los VPN de pago, son mucho más confiables que los VPN gratuitos, y resultan mucho mejores para protegerte al navegar. Aunque los VPN gratuitos pueden ser una forma de probar un VPN, no deberían ser factibles a largo plazo. Los expertos recomiendan optar por un VPN con buena reputación, que tenga un servicio gratuito para que puedas probar su producto, como es el caso de Surfshark, en lugar de elegir un VPN que es completamente gratuito. Como dice el refrán, “si no estás pagando un servicio, entonces tú eres el producto.”
Surfshark ofrece pruebas gratuitas de sus funciones VPN y aplicaciones para iOS, macOS y Android. Además, todos sus planes incluyen una garantía de reembolso de 30 días.