Nuevo revés para Amazon. La Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos (FTC, por sus siglas en inglés) ha acusado a la compañía de utilizar algoritmos secretos para inflar los precios en el mercado y elevar así su beneficio hasta obtener unas ganancias extras de más de 1.000 millones de dólares, según los nuevos detalles publicados del caso antimonopolio del regulador estadounidense contra la empresa.
Tal y como ha apostillado la FTC, “Amazon creó un algoritmo secreto denominado internamente Proyecto Nessie para identificar productos específicos para los que predecía que otras tiendas online seguirían los aumentos de precios de Amazon”. De este modo, la herramienta permitía no solo aumentar los precios de los productos de su marketplace, sino la de todo el mercado. “Amazon utilizó el Proyecto Nessie para extraer más de 1.000 millones de dólares directamente de los bolsillos de los estadounidenses”, ha denunciado el regulador estadounidense.
El pasado septiembre, la FTC y más de una docena de fiscales generales estatales demandaron a la compañía fundada por Jeff Bezos, alegando que opera un monopolio ilegal. Entre otras afirmaciones, la denuncia expuso que Amazon enterró los listados ofrecidos a precios más bajos de otros retailers y cobró a los vendedores tarifas elevadas para inflar los precios de los productos. Según los informes, Amazon dejó de utilizar Nessie en 2019, pero la FTC alega que «la compañía ha considerado repetidamente volver a activarlo«.
En concreto, la FTC ha reiterado que Amazon comenzó a probar el algoritmo de precios en 2010 para ver si otros retailers rastreaban sus precios y subir el de aquellos productos que probablemente fueran rastreados por los competidores. El organismo también ha acusado a la empresa de desactivar estratégicamente el algoritmo. “Amazon lo puso en pausa durante sus eventos de ventas Prime Day y la temporada de compras navideñas, cuando había más atención puesta sobre el por parte de los medios y los clientes, pero después volvía a ponerlo en marcha y más ampliamente para compensar la pausa”, sostiene la demanda. Solo en abril de 2018, remarcan, Amazon utilizó este método para fijar precios en más de ocho millones de artículos comprados por sus clientes. En su conjunto, significaron casi 194 millones de dólares. Finalmente, el algoritmo fue suspendido en 2019.
En contra, en declaraciones a la agencia de noticias Reuters, Tim Doyle, portavoz de la compañía, ha asegurado que “la FTC caracteriza gravemente erróneamente la herramienta de aumento de precios”. “Nessie se utilizaba para tratar de evitar que nuestra igualación de precios diera lugar a resultados en los que los precios se volvieran tan bajos que fueran insostenibles”, ha aseverado Doyle.