Cuando se trata de la inteligencia artificial (IA), gran parte de los responsables de negocio en Reino Unido (el 66%) están acuerdo en que puede ayudar a mejorar la experiencia del cliente, proporcionando nuevos datos.
Además, casi el 50% también se refirió a que la IA permite la automatización de tareas, liberando a los trabajadores de trabajo rudimentario y así centrarse en tareas más valiosas.
Según la encuesta realizada por Morar Consulting para la agencia digital Squiz, uno de cada cuatro responsables afirmó que la IA ayuda a reducir el error humano, incluso un 15% cree que mejorarían sus servicios de entrega.
Sin embargo también existen preocupaciones. Más de un tercio de los encuestados (36%) dijo que su principal preocupación es con el propio concepto de AI en sí, el no estar de acuerdo con la falta de control o la supervisión humana en la IA. Para otro 30%, la principal causa de preocupación era el coste que supone crear esa inteligencia artificial, y uno de cada cuatro citaron como preocupante los propios errores que causa la IA.
Mientras tanto, en Estados Unidos casi el 40% de los ejecutivos creen que que la IA debe proporcionar predicciones sobre la actividad relacionada con las máquinas, los clientes o la salud del negocio, según Narrative Science y National Business Research Institute. Otro 27% espera que la IA automatice las tareas de su empresa. Sí que existe una importante diferencia de parecer entre las empresas de Reino Unido y Norteamérica acerca de la mejora que ofrece en la experiencia de cliente. Mientras que en UK es mayoría, sólo el 10% de los responsables de negocio estadounidenses creen que se trata de una ventaja en este aspecto.