Desde la década de los 90, los servicios financieros tradicionales han cambiado considerablemente creando nuevas posibilidades de acceso a la información y facilitando su uso, además de presentar nuevas oportunidades a los inversores privados.
Antes de la era de Internet, el trading era principalmente dominio de las grandes instituciones financieras, corporaciones y gobiernos. Durante la última década, los servicios financieros online han madurado y asentado las bases para futuros desarrollos en este campo. Con la llegada de dispositivos online más sofisticados y modernos en los últimos años, podemos observar ahora un cambio decisivo hacia los móviles –no sólo en el sector financiero, sino en general– los expertos de la industria tecnológica predicen que para el año 2015 las tablets se venderán más que los ordenadores de escritorio.
Este aumento del uso de las tablets y los smartphones está impulsando a nivel global un cambio en el comportamiento del usuario, incluyendo la manera en la que los usuarios gestionan su portfolio. Actualmente el trading online comprende más del 50% del negocio de Plus500, compañía que ofrece una plataforma de trading online para clientes minoristas.
Hace apenas un par de años, las transacciones móviles representaban tan sólo el 10% del total. Esto refleja la tendencia mundial hacia la concepción de los dispositivos móviles como instrumento para realizar todo tipo de negocios, brindando a los usuarios una ventaja significativa para poder operar desde cualquier lugar y en cualquier momento. Con la previsión de un mayor aumento todavía para los próximos dos años, surgen aún más desafíos en este escenario tan cambiante con cada nuevo sistema operativo y cada nueva pieza de hardware.
En el campo financiero, procesar las peticiones de los clientes en el menor período de tiempo posible se traduce en un probable aumento de las ganancias. El trading en tiempo real es por definición una iniciativa de ritmo rápido, por eso los clientes la eligen como primera opción. Incluso con los controles de seguridad y todos los demás procesos necesarios que se ejecutan en segundo plano sin que cliente sea del todo consciente, nunca debe llevar más de 3 segundos para que una transacción se complete.
Hasta ahora, esto ha funcionado bien con los equipos fijos y las conexiones estables. Muchas start-ups de servicios financieros dependen de la tecnología disponible a la hora de intentar cumplir con estos requisitos, solamente mediante el uso de las tecnologías originales existentes. Lo ideal sería que estas soluciones se pudiesen ampliar con facilidad y de forma rentable. Sin embargo, con los dispositivos móviles este proceso no es tan fácilmente trasladable, ya que cuentan con una serie de requisitos que son diferentes. Estos dispositivos requieren un enfoque más sofisticado en su configuración tecnológica, dependiendo de las redes móviles y WiFi que son en ocasiones vulnerables a conexiones inestables y carentes de una red de alta calidad, así como también de una cobertura con suficiente intensidad.
En este punto, contar con una programación precisa y un conocimiento completo de todo el software involucrado es vital. Los programadores necesitan exprimir cada gota de rendimiento de estos dispositivos móviles, con el fin de combatir las conexiones inestables debido a la itinerancia, y la de otros dispositivos que no son tan eficientes como lo sería un ordenador de escritorio. En tales casos, incluso si el software original proviene de diferentes proveedores y parece funcionar correctamente, la demora en la conexión es un problema habitual para los usuarios remotos. Con una solución de software diseñada a medida para los clientes y sus dispositivos, estos problemas se pueden minimizar.
Tener una tecnología básica propia de la compañía y no pagar derechos de licencia externos también ofrece la máxima flexibilidad posible para tomar ventaja sobre la competencia. Por ejemplo, se puede ofrecer a los clientes una cuenta de prueba sin límite de tiempo, ya que no dependes de las ganancias de la misma para pagar los derechos de licencia.
También, es posible reaccionar a las cambiantes condiciones del mercado de manera mucho más rápida, flexible y sin costes adicionales, por ejemplo, si es necesario agregar una nueva función o dar soporte a un nuevo sistema operativo. Esto es necesario sobre todo en un ámbito con tanta cantidad de instrumentos. Actualmente, más de 2.100 instrumentos de Plus500 están disponibles en diversos mercados y bolsas de todo el mundo.
En el caso de que una compañía de moda anuncie su salida a bolsa, apostar por Plus500 puede ser vital para controlar el código de software. Este nuevo instrumento se puede añadir con facilidad y rapidez, dando a los clientes una ventaja real una vez que se inicia el trading. Además cuando se detectan nuevos riesgos de seguridad, se solventan directamente gracias a un equipo interno, sin que el cliente tenga que pasar a través de diversas capas de demora y burocracia para obtener una versión actualizada. En un entorno inestable como puede ser el de las finanzas, estos cortos períodos de tiempo pueden marcar la diferencia.
Con el cambio constante de infraestructura de los servicios financieros orientados con respecto a los dispositivos móviles, así como de los requisitos generales de innovación y de la mejora de la tecnología TI en general, se erige como mejor opción la de mantener su tecnología básica propia de la empresa, lo que permite utilizarla y controlarla como parte central de su marca. En particular, todos los elementos de la interfaz de usuario puedenformar una parte integral de la imagen de la marca, y su valor puede aumentar o disminuir conforme a su calidad y facilidad de uso. Por ello es recomendable que todas las empresas y, especialmente, las start-ups, observen de cerca a la tecnología y la entiendan como un servicio a ofrecer, y que deben asimilar de forma interna. Construya su actividad principal con una tecnología propia y será capaz de ofrecer mejores servicios. Mantenga el control total de las finanzas e invierta en nuevos aspectos dónde y cuándo los sus clientes lo necesiten.